-¿Qué es el Reino de Dios?- nos preguntó Pipol en clase.
Yo pensaba que se refería al cielo, al ''lugar al que vamos cuando morimos''. Pero estaba equivocado. Nuestro Dios es un dios de vivos, no de muertos, por lo que el Reino de Dios tiene que estar presente entre nosotros.
Esto lo intenta explicar Jesús con diferentes parábolas; citaremos algunas de ellas:
-Mt 13,24-30: parábola de la cizaña. El trigo y la maleza viven juntos, pero luego se separan.
-Mt 13,31-35: parábola del grano de mostaza. El Reino de los cielos se expande. Esto quiere decir que el Reino de Dios se extiende a todas partes, a nuestras propias acciones,etc. no a cuando muramos.
-Mt 13, 44-46: parábola del tesoro escondido y la perla. Hay que dejarlo todo por el Reino de Dios.
-Lc 15, 1-7: parábola de la oveja perdida: Todos, incluso los pecadores, pueden ir al Reino de Dios.
En resumen, se presenta como algo adonde los pecadores y los perdidos pueden ir, como un reino infinito que está en todas partes, donde hay que dejarlo todo para seguirlo, donde los humillados serán exaltados y los vanidosos humillados, etc.
Dios nos quiere a todos por igual, aunque seamos diferentes, buenos, malos, de otra religión...Él nos salvará a todos, porque somos sus hijos y un padre nunca hará nada malo por su hijo.
Alejandro y Adrián
